Kunchok Jinpa, un guía de turismo tibetano, murió el 6 de febrero de una hemorragia cerebral después de pasar siete años en una prisión china. Murió en el hospital sin su familia a su lado, ya que las autoridades no informaron que lo habían llevado gravemente enfermo.
El trato cruel e inhumano a los tibetanos por parte del gobierno chino debe terminar, y nuestros gobiernos no deben permitir que China se salga con la suya.
Kunchok Jinpa es el segundo tibetano, que sabemos, muere este año debido al brutal trato recibido en una prisión china. En enero, Tenzin Nyima, de 19 años, fue literalmente asesinado a golpes por la policía china después de haber participado en una protesta por la independencia de Tíbet.
En estas fechas, el año que viene, China será la sede de los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing 2022 y aprovechará la oportunidad para pasar por alto su violenta ocupación de Tíbet y sus abusos de derechos humanos a gran escala.
TOMA ACCIÓN - Únete al creciente llamado a los gobiernos para que boicoteen los Juegos Olímpicos de Beijing 2022, cualquier cosa menor será visto como un apoyo a la brutal ocupación de Tíbet por parte del gobierno chino y un flagrante desprecio por los derechos humanos.